Serguéi Shtemenko (1907-1976) por Anselmo Santos.
De origen cosaco, ingresa en el Ejército Rojo después de la muerte de Lenin (1924). Solo tiene diez años cuando se produce la Revolución de Octubre y no participa, por tanto, en la guerra civil. Sin hechos de armas, su carrera militar no pasa de lo normal: a los treinta años solo tiene el nivel equivalente a comandante y manda un batallón de instrucción de tanques pesados en el Distrito Militar de Kiev. En 1938, recién casado, se encuentra a gusto en ese apacible destino, por lo que recibe con fastidio la noticia de que, a propuesta de su coronel, ha sido seleccionado para ingresar en la Academia del Estado Mayor General abierta dos años antes. Intenta por todos los medios revocar la orden, pero así es el proceso de selección establecido, y Shtemenko se ve obligado a trasladarse a Moscú. En la academia se ponen de manifiesto sus grandes cualidades para el trabajo de Estado Mayor: capacidad de análisis, mente organizada, resistencia fisica y emocional, excelente memoria, paciencia, buen carácter, aptitud para redactar a vuelapluma órdenes e informes claros y concisos. Tanto es así que, al terminar los cursos, es destinado a la Dirección de Operaciones del Estado Mayor General, del que ya no sale hasta la muerte de Stalin (1953). De nada le valen sus insistentes demandas para obtener un mando de tropas. No solo se le niega: se le ordena abruptamente que deje de perseguir sueños y se concentre en su trabajo.
El régimen de promociones de Stalin no tiene nada que ver con el de los ejércitos tradicionales, en los que, salvo ascensos por hechos extraordinarios, las carreras, hasta el empleo de coronel, se han venido rigiendo por el inamovible principio de la antigüedad. Pero una cosa es la consigna de Stalin: «Buscad y encontraréis»; y otra, bien distinta, que Stalin dé su bendición al encontrado. Un jefe descubre un nuevo valor, le lleva, con cualquier pretexto, a presencia de Stalin y le hace presentar un determinado informe. Si Stalin queda bien impresionado, la «maniobra táctica de aproximación» ha dado resultado; en caso contrario, el presentador, como mínimo, es acusado de incompetencia. De esa forma, Sháposhnikov descubre e introduce a Vasilevski, y este, en agosto de 1942, recién nombrado jefe del Estado Mayor General, hace lo mismo con Shtemenko. Stalin queda tan satisfecho que acepta la propuesta de Vasilevski de nombrar al recién llegado, que solo tiene treinta y cinco años, segundo jefe de la Dirección de Operaciones: de hecho, responsable real de la misma, ya que quienes la mandan oficialmente se suceden uno tras otro, con intervalos de semanas, hasta la llegada deAntónov. Este confirma a Shtemenko en el puesto, y ambos forman parte, con Zhúkov y Vasilevski, del formidable quinteto que encabeza Stalin para la conducción de la guerra.
Las memorias de Serguei Shtemenko son una fuente inagotable de in formación sobre aquellos años. En sus páginas se describe el día día de los colaboradores de Stalin, sometidos a un régimen de trabajo despiadado: más de dieciséis horas diarias, siete días a la semana, dura prueba de resistencia física y mental, que pocos resisten en el Estado Mayor. Shtemenko se hace cargo formalmente de la Dirección de Operaciones al ser nombrado Antónov jefe del Estado Mayor General, puesto que él mismo ocupara después de la guerra. Cuando esta termina, Shtemenko solo tiene treinta y ocho años, y ya es, como Antónov, general de Ejército. Por negarse a criticar a Stalin,Jruschov le degrada en dos rangos. Brézhnev le devuelve sus estrellas y le nombra jefe de Estado Mayor del Pacto de Varsovia.
martes, 17 de octubre de 2017
viernes, 6 de octubre de 2017
Nuevo libro de J.A. Egido
Ya en circulación.
220 páginas
15 euros.
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ÍNDICE
Prólogo
del Embajador de la República Árabe Siria en Venezuela, Excelentísimo Doctor
Ghassan Abbas.
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17
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Objetivo imperialista: destruir Irak
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23
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I
HISTORIA DEL PARTIDO ÁRABE
SOCIALISTA BAAS EN IRAK
La creación del Partido árabe socialista Baas
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33
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Partido y régimen multiétnicos y
multirreligiosos
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45
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El Baas dividido en fracciones enfrentadas.
Purgas y luchas internas
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52
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Una política exterior imprudente, aventurera e
incoherente
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62
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La lucha patriota iraquí contra la quinta
columna kurda al servicio de los imperialistas
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72
|
Un clan de Tikrit domina el partido y el
Estado
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77
|
La estructura del partido
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79
|
El Socialismo en la época de Saddam Hussein
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84
|
Un régimen que combate la corrupción pero que
también la favorece
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88
|
Las milicias del partido
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89
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El giro islamista de un régimen acosado
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91
|
Los órganos de seguridad controlados por el
partido
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93
|
Las fuerzas armadas iraquíes controladas por
el grupo de Saddam
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94
|
El partido combatió la invasión en 2003 aunque
hubo traidores de alto nivel
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99
|
II EXTERMINAR UN PAÍS
Perseguidos por los USA
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103
|
Torturados hasta la muerte
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111
|
Asesinados por las fuerzas ocupantes y sus
aliados
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114
|
Capturados dirigentes de las estructuras
centrales del Baas
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123
|
Condenados a muerte
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127
|
Asalto, saqueo y destrucción de los bienes del
Baas y de sus miembros
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128
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III
PLAN DE DESTRUCCIÓN
SISTEMÁTICA DE IRAK
Persecución a los cuadros científicos
|
131
|
Liquidación de los cuadros de la industria
petrolera nacional
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133
|
Liquidación de los cuadros e infraestructura
de la economía nacional
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137
|
Aniquilar la industria nuclear iraquí
|
141
|
Desmantelado el sistema de salud pública, la
sanidad, la industria farmacéutica y automovilística y la Seguridad Social
|
143
|
Privatizada y extranjerizada la industria del
cemento
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145
|
Destruir la reforma agraria y la agricultura
misma
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146
|
Apoderarse de las telecomunicaciones
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149
|
Imponer una banca privada extranjera
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150
|
Saquear el gas natural
|
150
|
Dominar la industria metalúrgica
|
150
|
Liquidación de los cuadros de la educación
nacional
|
150
|
Destruida la historia, cultura y el arte
|
151
|
Destrucción del cuerpo de profesores e
investigadores universitarios
|
152
|
Destrucción del aparato judicial sustituido
por agentes enemigos
|
153
|
Liquidación de la élite militar iraquí
|
154
|
La condición de la mujer retrocede brutalmente
|
157
|
IV
LA GUERRA SECTARIA IMPULSADA POR LOS INVASORES DERROTA A LA
RESISTENCIA PATRIÓTICA
Destrucción, división y reestructuración de
las corrientes baasistas iraquíes
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161
|
El Baas iraquí exiliado en Siria
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164
|
Los luchadores clandestinos del Baas y la
traición de Al Duri
|
165
|
La resistencia de las tribus iraquíes a la
invasión imperialista
|
174
|
Bagdad ocupada y masacrada pero resistente y
leal
|
176
|
La resistencia baasista se organiza en la
ciudad de Mosul
|
178
|
Falluyah, ciudad símbolo y mártir de la
resistencia baasista contra el imperialismo
|
181
|
Samarra es otro modelo de ciudad resistente
antiimperialista
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183
|
Tikrit sufre, resiste y cae en manos de Daesh
|
185
|
Al Dur, otro bastión baasista
|
189
|
En Baquba viven y luchan juntos musulmanes
chiíes y suníes
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189
|
Ramadi, otra plaza fuerte de la resistencia
nacional patriótica
|
190
|
En Kirkuk se lucha por una ciudad
multinacional, iraquí, unida y fraterna frente a los terroristas kurdos
|
191
|
También en Basora lucha la resistencia
nacional patriótica
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194
|
Al Nasiriya, ciudad chií rebelde y
antiimperialista
|
195
|
La unidad de los musulmanes chiíes y suníes
contra la ocupación imperialista
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196
|
Los cristianos patriotas iraquíes
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199
|
Los kurdos antiimperialistas
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200
|
Los turcómanos fieles a Irak
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201
|
Los comunistas patriotas salvan el honor del
glorioso Partido Comunista de Irak (PCI)
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201
|
Los nacionalistas árabes no baasistas se
incorporan a la lucha
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206
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V
LOS
ERRORES DEL BAAS IRAQUÍ EN EL PODER Y EN LA RESISTENCIA CUESTIONAN SU
SUPERVIVENCIA POLÍTICA
Las fracciones baasistas se reconstruyen
clandestinamente en el Irak ocupado
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207
|
Anexos
Cuadro de las minorías iraquíes
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211
|
Clasificación étnico-cultural antes de la
invasión y ocupación
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212
|
Lideres antiimperialistas actuales del país
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213
|
Bibliografía de referencia
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214
|
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